13 mil 752 niños, niñas y adolescentes en situación de calle

DIFEM Invita a Desalentar el Trabajo Infantil en Temporada Vacacional

Toluca, Edo. Méx.-18 de julio- Evitar la contratación de menores de edad en espacios laborales no aptos, así como dar dinero en la calle y por el contrario apoyar los programas de becas del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Estado de México (DIFEM), son parte de las recomendaciones para desalentar el trabajo infantil que desafortunadamente se incrementa en la temporada vacacional.

Marcos Zamora Sarabia, director de Prevención y Bienestar Familiar del DIFEM, precisó que durante el periodo vacacional aumenta el número de niños que realizan alguna actividad en la vía pública; “el último estudio del DIFEM detectó a 13 mil 752 niños, niñas y adolescentes en situación de calle en todo el territorio estatal, por lo que calculamos que este incremento se ubica en aproximadamente 3 por ciento”, subrayó.

Precisó que en su mayoría se trata de niños que acuden a la escuela, por lo que la atención de sus requerimientos escolares es una de las razones por las que realizan trabajo temporal de calle; sin embargo, dijo, ello conlleva un riesgo.

El funcionario estatal refirió que cuando el padre de familia percibe que hay una entrada económica extra al hogar, puede optar porque el hijo abandone la escuela y se dedique al trabajo en la vía pública; advirtió que en el caso de los adolescentes, éstos pueden dejarse seducir por el dinero inmediato y abandonar sus estudios.

Por el contrario, agregó, si el padre está consciente del valor del estudio, sólo permitirá que su hijo trabaje en la temporada vacacional, porque a pesar de la situación crítica resiste la seducción del dinero y se mantiene firme en el propósito de continuar sus estudios, fortaleciendo con ello a la propia familia.

Alertó que las explotación económica y la sexual comercial infantil; así como los accidentes, y los embarazos prematuros, son ejemplo de los riesgos más serios que implica el trabajo entre menores, de ahí la importancia de las acciones preventivas y de atención a niñas, niños y adolescentes involucrados, pero sobre todo, de la intervención positiva de sus familias y de la sociedad en general.